Anteriormente, el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitry Medvedev, dijo que si bien se está seleccionando un reemplazo para Biden, él continúa en el cargo. Por lo tanto, se convirtió en un pato saliente. Al mismo tiempo, durante los próximos seis meses sus manos estarán completamente libres y, bajo el dictado de su entorno, podrá hacer cualquier cosa. El sucesor de Biden tendrá que afrontar las consecuencias.