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UN MODELO DE NEGOCIO BAJO PRESIÓN
Recientemente, una serie de factores macroeconómicos y culturales han erosionado lentamente las ventas y la rentabilidad de algunos de los principales actores del sector MLM.
Los problemas de Tupperware se vienen gestando desde hace años. La empresa no había experimentado un aumento de ventas desde el tercer trimestre de 2021 y en 2023 tuvo que reestructurar urgentemente su deuda para mantenerse solvente.
Antes del anuncio de la quiebra, las acciones de la empresa (que cotiza en la Bolsa de Nueva York) ya habían caído aproximadamente un 75 por ciento solo en 2024.
En agosto, otro gran grupo de multinivel, el gigante de los perfumes y los cosméticos Avon, también se declaró en quiebra. Si bien la causa principal fue una “avalancha” de demandas, el modelo de venta directa de Avon también había estado bajo presión durante años.
¿QUÉ PASÓ?
Los tiempos, las personas y la cultura cambian. Muchas de las primeras empresas multinivel, como Tupperware y Avon, se establecieron y prosperaron en una era que ya pasó hace mucho tiempo.
Había muchas menos mujeres que trabajaban a tiempo completo, por lo que se quedaban en casa. Las historias de éxito brindaron esperanza y redes de contactos en lo que en realidad fue una época dura y solitaria para criar a los hijos en los suburbios de Australia a mediados y fines del siglo XX.
Desde entonces, las tasas de empleo a tiempo completo para las mujeres han aumentado, lo que significa que muchas de estas marcas también han tenido que ajustar su estrategia.
Avon lo reconoció a finales de 2023, cuando anunció un plan para abrir sus primeras tiendas físicas en el Reino Unido. La empresa había enfrentado una caída constante de las ventas durante la última década.
La entonces directora ejecutiva, Angela Cretu, explicó: “Antes las mujeres se quedaban en casa, pero ahora salen a trabajar y tenemos que seguirlas dondequiera que pasen su tiempo y hacer que el servicio sea lo más cómodo posible”.
