CIUDAD DE MÉXICO: El fabricante de automóviles chino BYD está buscando del gobierno de México una extensión de la desgravación arancelaria para las importaciones de vehículos eléctricos, dijo un ejecutivo al periódico Reforma en una entrevista publicada el viernes, mientras la compañía pretende construir una planta en el país.
Un decreto que exime entre el 15 y el 20 por ciento de los pagos de aranceles a los vehículos eléctricos importados de países con los que México no tiene un acuerdo comercial expirará a finales de mes, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador deje el cargo.
«La propuesta al gobierno mexicano es ver la posibilidad de que, a través de nuestra inversión en una nueva planta, tengamos las condiciones para extender el decreto», dijo a Reforma el presidente del país, Jorge Vallejo.
BYD inició sus ventas en el mercado mexicano el año pasado, importando sus vehículos del extranjero.
Desde entonces ha anunciado planes para construir una planta en el país para sacar hasta 500.000 automóviles al año para el mercado local.