Las industrias del café y las flores cortadas de Etiopía se enfrentan a importantes desafíos debido a las nuevas regulaciones de la UE. A partir de enero de 2025, los productores deben cumplir con la Ley de Diligencia Debida del bloque, que exige estrictas normas ambientales para exportar a Europa. Millones de pequeños productores de café tendrán que demostrar que sus tierras están libres de deforestación, mientras que los productores de flores tendrán que hacer frente a una plaga que amenaza los mercados europeos o correr el riesgo de ser excluidos del comercio. Esto plantea una gran preocupación para Etiopía, que exporta el 30 por ciento de su café y el 8 por ciento de sus flores a Europa. Adherirse a estas nuevas normas de la UE será una tarea de enormes proporciones, como informan Clothilde Hazard y Olivia Bizot de FRANCE 24.
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