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GINEBRA: Sesenta y siete miembros de la Organización Mundial del Comercio acordaron el jueves (2 de diciembre) recortar regulaciones como los requisitos de licencia impuestos a los proveedores de servicios que operan en países extranjeros, una medida que podría ahorrar US $ 150 mil millones en costos comerciales anuales.
El grupo de países desarrollados y algunos en desarrollo, desde Perú hasta Filipinas, se comprometió con una mayor transparencia, seguridad jurídica y un proceso regulatorio más sencillo con aplicaciones electrónicas y tarifas claras y razonables.
Los signatarios, incluidos también Estados Unidos, China y miembros de la UE, son una minoría de los 164 miembros de la OMC, pero representan el 90 por ciento de todo el comercio de servicios.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha estimado que la implementación de regulaciones más flexibles en los países más grandes del G20 podría reducir los costos comerciales hasta en un 6 por ciento, con ahorros anuales que ascienden a 150 mil millones de dólares.
La banca, la tecnología de la información, las telecomunicaciones, la arquitectura y la ingeniería serían algunos de los sectores de servicios que más se beneficiarían.
El acuerdo tiene como objetivo proporcionar claridad a las empresas de servicios que a menudo se ven obligadas a presentar varios documentos en papel a los reguladores y no saben cómo se procesan sus solicitudes.
El European Services Forum, cuyos miembros van desde Apple hasta Zurich Financial Services, acogió con satisfacción la conclusión de las negociaciones sobre un acuerdo y dijo que la industria había estado pidiendo algo como esto durante más de 20 años.
El acuerdo incluía una disposición contra la discriminación entre hombres y mujeres, la primera de este tipo en un acuerdo de la OMC. También prevé un período de transición de siete años para que los países en desarrollo cumplan.
Si bien la mayoría de los miembros de la OMC no se han adherido al acuerdo, son libres de hacerlo y sus negocios aún se beneficiarían de regímenes regulatorios más transparentes y eficientes de los 67 miembros participantes.
