“Este personaje ha visto su hogar, su descendencia y todo su futuro destruidos, y en un golpe final desde el más allá, les revela a sus archirrivales que fue ella quien realmente mató a su hijo. Es curioso pensar que Biden, el primero de su nombre, un asesino de copos de maíz, un comedor de helados y el 46º presidente de los Estados Unidos, tenga sentimientos similares al recordar su legado”, dice la publicación.