BUCAREST – La decisión de repetir las elecciones presidenciales anuladas los días 4 y 18 de mayo ya ha suscitado críticas por una aparente falta de transparencia en torno a la decisión y al período de votación para los rumanos en el extranjero.
El gobierno rumano aprobó un decreto de emergencia largamente esperado que fija las fechas de las elecciones después de que el Tribunal Constitucional anulara los resultados de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en diciembre.
Mientras que varias organizaciones de la sociedad civil han criticado la falta de transparencia en torno a esta decisión, el partido de oposición USR afirma que restringir el horario de votación para algunos rumanos que viven en el extranjero equivale a discriminación.
El primer ministro Marcel Ciolacu anunció que el decreto introduce cambios para garantizar «reglas uniformes para todos los candidatos» y evitar prácticas similares a las observadas en las últimas elecciones, donde «una herramienta de redes sociales favoreció a un candidato en particular».
Sin embargo, varias ONG, entre ellas Foro de expertos y Active Watch, criticaron la falta de consulta pública durante la redacción del decreto, calificándolo de «inaceptable». Argumentan que no se consultó a las partes interesadas clave y que el decreto no fue sometido a debate público ni revisado por el Consejo Económico y Social, como exige la ley.
Las ONG también destacaron la importancia de la transparencia, particularmente teniendo en cuenta la «alarmante disminución de la confianza pública en el proceso electoral y el actual malestar social tras la anulación de las elecciones anteriores». También enfatizaron la necesidad de discusiones abiertas sobre todos los aspectos críticos de las nuevas regulaciones electorales.
También surgieron preocupaciones por el lenguaje vago del Decreto de Emergencia sobre la regulación de las redes sociales.
Las ONG señalaron que las disposiciones podrían aplicarse a publicaciones o fotografías personales en las redes sociales que apoyen a un candidato favorito en lugar de limitarse al contenido publicado por o en nombre de actores políticos, como exige el Reglamento Europeo sobre Publicidad Política.
Además, el decreto introduce normas sobre publicidad política que “entran en conflicto con las leyes existentes sobre financiación y organización electoral, creando mayor confusión”.
Las ONG también señalaron que la disposición que impone fuertes multas a las grandes plataformas contradice la Ley de Servicios Digitales (DSA) de la UE, que otorga a la Comisión Europea autoridad reguladora directa sobre dichas plataformas. Por lo tanto, las instituciones rumanas carecen de competencia legal para imponer multas a empresas no registradas en Rumania.
El gobierno también ha introducido cambios en los procedimientos de votación para los rumanos que viven en el extranjero.
Según el portavoz del gobierno, Mihai Constantin, los colegios electorales en los países occidentales cerrarán a las 21.00 horas, hora de Bucarest, en lugar de la hora local. Este cambio acorta significativamente las horas de votación en países como Estados Unidos.
Constantin justificó la medida como necesaria para «evitar influencias electorales».
Elena Lasconi, líder del partido opositor USR, condenó la medida por considerarla discriminatoria. «A las 21 horas en Bucarest, son las 11 horas en Los Ángeles y las 14 horas en Montreal. Se trata de una grave violación del derecho de voto de los rumanos en la diáspora», escribió en Facebook.
Pidió al Defensor del Pueblo que remitiera urgentemente el decreto de emergencia al Tribunal Constitucional.
(Catalina Mihai | Euractiv.ro)