El alcalde de Ámsterdam, Femke Halsema, emitió una ordenanza de emergencia que autoriza a la policía a despejar la plaza central de los museos, luego de que los manifestantes violaran la prohibición de realizar reuniones públicas durante la última ola de infecciones por coronavirus.
Los manifestantes, que en su mayoría no usaban máscaras y quebrantaron las reglas de distanciamiento social, también ignoraron una orden de no realizar una marcha y caminaron por una vía principal, tocando música y sosteniendo paraguas amarillos en señal de oposición a la medidas gubernamentales.
Holanda entró en una bloqueo repentino el 19 de diciembre, con el gobierno ordenando el cierre de todas las tiendas excepto las esenciales, así como de restaurantes, peluquerías, gimnasios, museos y otros lugares públicos hasta al menos el 14 de enero.
Las reuniones públicas de más de dos personas están prohibidas según el conjunto de restricciones actual.
Como otro países europeos, los Países Bajos impusieron las medidas en un esfuerzo por prevenir una nueva ola de la variante Omicron del coronavirus que podría abrumar a un sistema de salud ya tenso.
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