Las luchas de los grupos guerrilleros en Colombia ponen en peligro a la población civil
Los enfrentamientos entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) disidentes en el departamento de Arauca, cerca de la frontera con Venezuela, han dejado al menos 16 muertos, se informó el lunes.
El Defensor del Pueblo de Colombia, Carlos Camargo, dijo a los reporteros que los cuerpos fueron retenidos en morgues donde se determinará la causa de las muertes.
Los tiroteos entre los dos grupos estallaron el domingo por el control territorial de las economías ilícitas. en la frontera, dijo el Ejército de Colombia en un comunicado. El alcalde de Arauquita, Etelivar Torres, advirtió en un comunicado que la cifra de muertos podría llegar a 21 personas.
Mientras tanto, la Iglesia Católica ha instado a ambos grupos a evitar que los civiles vivan hostilidades mutuas. “Pedimos que se brinde la debida asistencia a los heridos, que se respete la vida e integridad de los detenidos y que los cuerpos de los fallecidos sean tratados con dignidad”, Dijo en un comunicado el obispo de Arauca, Jaime Cristóbal Abril.
La delegación colombiana del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) ha lanzado un llamado al cumplimiento del Derecho Internacional Humanitario para proteger a la población civil y activar planes de contingencia.
La ACNUDH también insistió en que se sigan las recomendaciones de la Defensoría del Pueblo en alertas tempranas para proteger a más de 69.000 civiles, en su mayoría bajo normas especiales de protección como las comunidades indígenas.
La Defensoría del Pueblo ha dicho que ha habido “homicidios, amenazas, detenciones ilegales, desplazamientos masivos y riesgo de desplazamiento forzado”.
Las autoridades regionales de Arauca denunciaron que se estaban intensificando los enfrentamientos en varios municipios entre los disidentes de las FARC y la guerrilla del ELN.