SAN PEDRO DE POAS, Costa Rica: Un pequeño río en medio de plantaciones de café, campos de caña de azúcar y un bosque proporciona energía a una planta hidroeléctrica en Costa Rica que alimenta a cientos de computadoras conectadas al negocio de minería de criptomonedas.
Más de 650 máquinas de 150 clientes operan sin parar desde ocho contenedores alimentados por la planta junto al río Poás, a 35 kilómetros (22 millas) de San José, la capital de un país que genera casi toda su energía a partir de fuentes verdes.
La planta se vio obligada a reinventarse después de 30 años porque el gobierno dejó de comprar energía eléctrica durante la pandemia debido al excedente de suministro eléctrico en el país centroamericano, donde el Estado tiene el monopolio de la distribución de energía.
“Tuvimos que pausar la actividad durante nueve meses, y hace exactamente un año escuché sobre Bitcoin, blockchain y minería digital”, dijo Eduardo Kooper, presidente de la empresa familiar propietaria de la finca de 60 hectáreas Data Center CR y la planta.
«Al principio era muy escéptico, pero vimos que este negocio consume mucha energía y tenemos un excedente».
La hidroeléctrica, con sus tres plantas valoradas en US$13,5 millones y una capacidad de tres Megavatios, invirtió US$500.000 para incursionar en el hospedaje de computadores de minería digital.
Kooper dijo que los mineros internacionales de criptomonedas están buscando energía limpia y barata y una conexión a Internet estable, que Costa Rica tiene en abundancia. Sin embargo, dijo que el gobierno de Costa Rica debería ser más agresivo para tratar de atraer más negocios de criptominería, aunque no dio detalles.
El gobierno no respondió a una solicitud de comentarios.
Costa Rica carece de una regulación específica para las criptomonedas, a diferencia de El Salvador, que se convirtió en el primer país del mundo en adoptar Bitcoin como moneda de curso legal en septiembre de 2021.
El banco central de Costa Rica dijo que estaba brindando espacio para la innovación tecnológica para permitir que tomara forma una industria Fintech, y estaba monitoreando constantemente los desarrollos.
Hasta el momento todos los clientes de Data Center CR son locales, como Mauricio Rodríguez, un ingeniero de seguridad informática de 31 años que ingresó a la minería digital para ganar dinero extra desde casa en 2021 con equipos valorados en US$7.000.
«Instalarlo en este lugar es mucho más rentable que en casa», a casi la mitad del costo, calculó, luego de conectar su computadora a la red en la planta alimentada por el río.
(Reporte de Alvaro Murillo; Escrito por Valentine Hilaire; Editado por David Gregorio)