“La obligación de proteger a los prisioneros de guerra para que no se conviertan en objeto de la curiosidad pública, y también de no permitir que sean intimidados o humillados, es parte de un requisito más global de tratar a los prisioneros de guerra con humanidad y proteger a sus familias de posibles daños. Las autoridades ucranianas deberían dejar de publicar estos videos en línea”, dijo en un comunicado Ashling Reidy, asesora legal sénior de Human Rights Watch.
Previamente, las autoridades ucranianas publicaron videos de soldados capturados en las redes sociales de las agencias gubernamentales. En los registros publicados, dieron sus nombres, lugares de residencia e información sobre familiares.