Entierran a fiscal paraguayo asesinado
El fiscal antidrogas y crimen organizado de Paraguay, Marcelo Pecci, quien fue asesinado a sangre fría la semana pasada mientras se encontraba de luna de miel en un exclusivo balneario de Colombia, fue sepultado este domingo en el cementerio de la Recoleta de Asunción.
Su cuerpo llegó a Paraguay la madrugada del sábado, horas después de que su viuda Claudia Aguilera y algunos colegas paraguayos que habían viajado a Colombia para asistir a las autoridades locales en las indagatorias del magnicidio aterrizaran en el aeropuerto Silvio Petirossi en el avión presidencial del país.
Horas antes del asesinato, Aguilera había publicado en las redes sociales que estaba embarazada. Durante el funeral, el padre de Pecci, el exjuez Francisco Pecci, anunció que su nieto se llamará Marcelo, en honor a su hijo.
Antes de dirigirse al cementerio, el coche fúnebre de Pecci hizo una parada en el estadio de Guaraní, club de fútbol del que era hincha e incluso miembro de la junta directiva, mientras los hinchas coreaban cánticos en una emotiva despedida.
Hubo una segunda parada en el Colegio San José, donde Pecci había estudiado y donde también se ofreció un servicio religioso.
Las autoridades colombianas que investigan el asesinato han sido muy cautelosas al hablar del mismo con la prensa. Sin embargo, se cree que el asesinato estuvo relacionado con uno de los casos en los que trabajaba Pecci.
La policía colombiana ha estado recorriendo Cartagena y las áreas cercanas tratando de determinar dónde podrían haberse escondido los sicarios.
El comisionado de la Policía Nacional de Paraguay, Nimio Cardozo, quien viajó a Cartagena, dijo a los periodistas que los asesinos tardaron “13 minutos” en alquilar las motos acuáticas, dispararle tres veces a Pecci y huir de la escena. También dijo que se habían recuperado “tres cartuchos de pistola de 9 milímetros”.
Los investigadores también están siguiendo pistas en Brasil, Paraguay y Estados Unidos. La DEA, el FBI y Europol han sido convocados para encontrar a los perpetradores.