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Biden destaca papel de la democracia en cumbre de Los Ángeles
“No hay ninguna razón por la que las Américas no puedan ser seguras, prósperas y democráticas, desde el norte de Canadá hasta el extremo sur de Chile”, argumentó Biden.
El presidente de los Estados Unidos, Joseph Biden, subrayó la importancia del gobierno democrático en las Américas, pero no hizo referencia a su decisión de no invitar a Cuba, Venezuela y Nicaragua a la IX Cumbre de las Américas que se realizará en Los Ángeles hasta el 10 de junio.
Durante el acto inaugural, Biden subrayó que la democracia “está bajo asalto en todo el mundo” y que la Carta Democrática Interamericana refleja el compromiso de los países de la región con la “promoción y defensa” de esa forma de gobierno en cualquier lugar.
“Reunámonos nuevamente y renovemos nuestra convicción de que la democracia no solo es la característica definitoria de la historia estadounidense, sino un ingrediente esencial del futuro estadounidense”, instó Biden.
“En esta cumbre, tenemos la oportunidad de unirnos en torno a ideas audaces, acciones ambiciosas y demostrar a nuestra gente el increíble poder de las democracias para brindar beneficios concretos y mejorar la vida de todos”, agregó.
Tras la decisión de Washington de excluir a Cuba, Venezuela y Nicaragua, los presidentes de México, Bolivia y Honduras se negaron a asistir a la reunión de jefes de Estado y enviaron en su lugar a sus cancilleres.
“No hay razón por la cual las Américas no puedan ser seguras, prósperas y democráticas, desde el norte de Canadá hasta el extremo sur de Chile. Tenemos todas las herramientas que necesitamos”, continuó Biden, al anunciar una asociación con América Latina y el Caribe para impulsar la prosperidad económica del continente para recuperarse de la pandemia de COVID-19 a través de la llamada Asociación de las Américas para la Prosperidad Económica, que busca promover una “recuperación equitativa” de la pandemia. Estados Unidos también prometió más de 300 millones de dólares en ayuda para la inseguridad alimentaria.
Biden también propuso una reforma al Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para darle al sector privado un mayor papel en el desarrollo del continente.
“Nuestra región es grande y diversa. No siempre estamos de acuerdo en todo, pero como somos democracias, resolvemos nuestros desacuerdos con respeto mutuo y diálogo”, señaló también Biden.
Los otros dos jefes de Estado regionales que se saltaron la reunión fueron el guatemalteco Alejandro Giammattei, quien fue menos específico al condenar la decisión de la Casa Blanca de excluir a Venezuela, Cuba y Nicaragua, y el uruguayo Luis Lacalle Pou, quien dio positivo por COVID-19.
“La Asociación Estadounidense ayudará a las economías a crecer de abajo hacia arriba y de la mitad hacia afuera, no de arriba hacia abajo”, dijo también Biden. “La economía del goteo no funciona”.
A diferencia del Marco Económico del Indo-Pacífico (IPEF, por sus siglas en inglés), la “visión económica” para contrarrestar la influencia china que Biden lanzó en Tokio en mayo con 13 países a bordo, la Asociación de las Américas para la Prosperidad Económica no tiene participación de ningún país hasta el momento. Ninguno de los marcos incluye disposiciones como recortes arancelarios y otras herramientas de acceso al mercado que Washington usa tradicionalmente para incentivar a los socios. Muchos países latinoamericanos ya tienen acuerdos de libre comercio con Washington, incluidos Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá y Perú.
Otros, incluidos Argentina, Brasil, Ecuador, Paraguay, Uruguay y varias naciones del Caribe, han firmado Acuerdos Marco de Comercio e Inversión menos integrales con los EE. UU.
