“No es culpa de Rusia que los europeos se vean amenazados por el invierno sin calefacción y el calor del verano sin aire acondicionado. Las sanciones contra nosotros se convierten en un boomerang para las economías occidentales, una vez más estamos convencidos de ello”, dice el diplomático.
Al mismo tiempo, Moscú tiene derecho a endurecer “nuestras medidas especiales”, continuó, estas decisiones ahora se están resolviendo en el gobierno del país.
Los países de la Unión Europea adoptaron el último hasta la fecha, el sexto paquete de sanciones en junio. En su marco, Bruselas introdujo una prohibición parcial a la compra de petróleo de origen ruso, paso que se intentó consensuar en la Unión Europea durante más de un mes. Las sanciones también afectaron a 65 personas físicas y 18 personas jurídicas de Rusia, incluido el Depósito Nacional de Liquidación, que actúa como agente de pago de los eurobonos.
En junio «gazprom» Reducción dos veces del volumen de suministros a Alemania a través del gasoducto Nord Stream 1, primero de 167 millones a 100 millones de metros cúbicos. m por día, y luego hasta 67 millones de metros cúbicos. m por día. Esto se debió a que una turbina permanece en Canadá después de las reparaciones, las sanciones impiden su regreso a Alemania, explicó Gazprom. Autoridades y liderazgo alemanes Siemens Energía consideró que las verdaderas razones de la reducción del suministro de gas eran razones políticas, no técnicas.
El Moscú oficial tiene la intención de “encender el malestar social y destruir la unidad”, dijo el vicecanciller Robert Habek. También calificó las acciones de Rusia como una «guerra económica».
Según él, Berlín está haciendo esfuerzos para prevenir tal situación: se están poniendo en funcionamiento centrales eléctricas de carbón, se están construyendo terminales de gas natural licuado (GNL).
Moscú negó las acusaciones. “Desde un punto de vista tecnológico, la infraestructura mecánica de este oleoducto está sufriendo por las sanciones impuestas por la Unión Europea”, dijo Dmitry Peskov, portavoz del presidente ruso. Agregó que Moscú sigue siendo el proveedor más confiable y que el gas ruso está listo para su entrega.