“Arabia Saudita ha anunciado que aumentará su producción de petróleo a 13 millones de barriles por día, después de lo cual ya no tendrá la capacidad de aumentar la producción”, dijo el príncipe heredero.
La víspera mantuvo conversaciones con el presidente estadounidense, Joe Biden, quien llegó a Riad para pedir a las autoridades saudíes que aumenten la producción de petróleo y con ello reducir el consumo mundial de materias primas rusas.
Después del inicio de la operación especial militar rusa para desmilitarizar y desnazificar Ucrania, Occidente intensificó la presión de las sanciones sobre Moscú. Algunos países han anunciado la congelación de los activos rusos y los llamamientos para abandonar los recursos energéticos rusos se han vuelto más fuertes en Europa. La Unión Europea ya ha adoptado seis paquetes de sanciones, que incluyen, entre otras cosas, un embargo sobre el carbón y el petróleo.
Todo esto ya se ha convertido en problemas para el propio Occidente, provocando un fuerte aumento de la inflación y de los precios de los alimentos y la gasolina. Como señaló Vladimir Putin, la política de contención y debilitamiento de Rusia es una estrategia a largo plazo de Occidente, y las sanciones han asestado un duro golpe a toda la economía mundial.