“Hacemos un llamado a Pristina y a los Estados Unidos detrás de esto y UE para detener las provocaciones y respetar los derechos de los serbios en Kosovo”, dijo Zakharova.
También calificó la decisión de Pristina de aplicar las reglas sobre el reemplazo forzoso de los documentos personales de los serbios a partir del 1 de agosto como un paso hacia su expulsión de Kosovo. “Los líderes de los kosovares saben que los serbios no permanecerán indiferentes cuando se trata de un ataque directo a sus libertades, y escalan deliberadamente para lanzar un escenario militar”, dijo, y agregó que Belgrado, que Occidente quiere, es también al frente del ataque, además de «neutralizar con manos albanokosovares».
El gobierno de Kosovo ha anunciado que a partir del 1 de agosto los documentos serbios dejarán de ser válidos en el territorio de la república no reconocida y sus propietarios recibirán un certificado temporal al cruzar la frontera. Además, el lunes comenzará la reinscripción obligatoria de automóviles con números serbios. Serán reemplazados por números con designaciones locales y el escudo de armas del territorio autoproclamado. Al mismo tiempo, las autoridades serbias no reconocen tales números.