¿LA SINICIZACIÓN DEL INTERNET GLOBAL?
¿Qué pasa con la posible influencia del gobierno chino? La empresa matriz de TikTok ByteDance, una empresa privada valorada por última vez en 180.000 millones de dólares estadounidenses en diciembre de 2020, ha delimitado sus operaciones internacionales mediante la creación de una estructura corporativa independiente con sede en Singapur. TikTok dice que todos los datos de sus usuarios internacionales se almacenan en EE. UU. y Singapur y, a partir de 2023, también en Irlanda. La compañía insiste en que ningún flujo de datos personales al gobierno chino, ni le daría acceso a Beijing a dichos datos, incluso si se lo solicita.
En su libro bien investigado, TikTok Boom, Chris Stokel-Walker investigó estas afirmaciones. No encontró evidencia de fuga sistemática de datos personales. Pero los ingenieros en China accedieron a algunos datos para probar algoritmos o detectar ataques de bots, por ejemplo.
“TikTok no es una célula durmiente de las redes sociales que espera ser activada de forma remota en los teléfonos de millones de occidentales”, concluyó. “La realidad aquí es que no hay una gran estafa, sino una pequeña mentira piadosa”.
Incluso si esa conclusión es correcta, podría no ayudar. Alguno senadores estadounidenses todavía están atacando a TikTok como un instrumento del poder blando chino. Existe el riesgo de que la empresa corra la misma suerte que Huawei, el fabricante chino de equipos de telecomunicaciones incluido en la lista negra de Estados Unidos.
Pero si TikTok puede evitar convertirse en un saco de arena geopolítico, podría llegar a simbolizar un momento en la evolución del ciberespacio: la sinización de Internet global, como lo llama el analista tecnológico Ben Thompson.
En este mundo digital, el control centralizado del contenido al estilo chino a través de algoritmos de recomendación se convierte en una característica, no en un error. Durante varias décadas, EE. UU. ha dominado las normas, los valores y las prácticas de la Internet de los consumidores. El auge de TikTok apunta a un futuro más disputado.