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La mente del primer ministro croata, Andrej Plenkovic, estaba en otra parte en una cumbre de las naciones del sur de la Unión Europea en España el viernes (9 de diciembre), concretamente en la sorprendente victoria de su país en la Copa del Mundo contra Brasil.
La reunión en Alicante fue, declaró, “la reunión más emocionante en Europa nunca”.
Cuando Croacia logró el empate al final de la prórroga de los cuartos de final en Qatar para preparar una tanda de penaltis que puso los nervios de punta, los nueve líderes del grupo EU-Med 9, incluido el presidente francés Emmanuel Macron, se reunieron para ver la acción.
“Todos se unieron para ver los penaltis en mi móvil, fue muy divertido”, dijo Plenkovic.
Croacia, los finalistas derrotados de la Copa del Mundo hace cuatro años, ganaron la tanda de penales 4-2 para jugar contra Argentina en las semifinales el 13 de diciembre.
“La sensación es fantástica. Esta es una generación brillante de jugadores croatas”, dijo, antes de que la emoción de la ocasión realmente lo atrapara y agregó: “Siempre llevaré a Alicante en mi corazón”.
Macron se unió al primer ministro español, Pedro Sánchez, para aplaudir a Plenkovic.
Su homólogo portugués, Antonio Costa, también felicitó a su colega croata, pero tuvo un pensamiento para sus compañeros lusófonos, diciendo que «cada vez que Brasil pierde, Portugal se siente un poco triste».
