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Al abrir la ceremonia de conmemoración, la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, calificó el Holocausto como “el mayor crimen de la historia”. Un crimen destinado a borrar a un pueblo de la tierra. Un crimen diseñado para infligir horror a generaciones. Un crimen que ha dado forma a nuestro proyecto europeo moderno, convirtiéndolo en una encarnación de la eterna promesa: Nunca más”.
Ella señaló que el Holocausto no sucedió de la noche a la mañana y que las alarmas deberían haber sonado mucho antes de que finalmente lo hicieran. A pesar de los años que han pasado, sigue siendo esencial continuar conmemorando el Holocausto porque el antisemitismo todavía existe y porque esta es la última generación en dar testimonio de primera mano de los sobrevivientes del Holocausto, continuó el presidente Metsola.
El Parlamento Europeo siempre defenderá los valores de respeto, dignidad humana, igualdad y esperanza, prometió, y agregó que el Parlamento nunca será silenciado en su lucha por defender los valores humanos y rechazar el odio y la discriminación.
El presidente de Israel, Herzog, abrió su discurso diciendo: “Hoy me presento ante ustedes como presidente del Estado de Israel, el estado-nación democrático del pueblo judío, pero mi corazón y mis pensamientos están con mis hermanos y hermanas asesinados en el Holocausto. cuyo único crimen fue su judaísmo y la humanidad que tenían”.
“Europa no podría ser lo que es sin los judíos”, dijo el presidente Herzog, pero el antisemitismo, “como una enfermedad autoinmune”, hizo que Europa atacara parte de su propio ADN, y se borró una historia milenaria compartida. Hizo hincapié en que este antisemitismo no surgió en el vacío, sino que “la máquina de muerte nazi no habría logrado llevar a cabo su visión de pesadilla si no hubiera encontrado suelo fertilizado con odio a los judíos”. Para el presidente Herzog, el antisemitismo permanece y la negación del Holocausto aún existe, bajo nuevas formas y se difunde a través de nuevos canales, particularmente en Internet. “La distancia entre una publicación de Facebook y la destrucción de lápidas en un cementerio es más corta de lo que pensamos”, dijo. “Los tuits trastornados pueden matar. Realmente pueden”.
Europa tiene un papel vital que desempeñar para hacer retroceder este antisemitismo, señaló. Al pedir a los eurodiputados que no se queden al margen ante el aumento del antisemitismo, el presidente Herzog les imploró que “lean las señales de advertencia, detecten los síntomas de la pandemia del antisemitismo y luchen contra ella a toda costa. Deben asegurarse de que todos los judíos que deseen vivir una vida judía plena en sus países puedan hacerlo de manera segura y sin miedo”. A través de la educación, la legislación y cualquier otra herramienta a su disposición, los eurodiputados y la UE deben comprometerse a erradicar el racismo, el odio y el antisemitismo en todas sus formas, dijo. El presidente Herzog también pidió al Parlamento Europeo que adopte plenamente la definición de antisemitismo de la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto.
Subrayó que “la crítica al Estado de Israel no debe cruzar la línea hacia la negación de la existencia misma del Estado de Israel, el estado-nación del pueblo judío”. Hablando de las relaciones Europa-Israel, dijo que “el Estado de Israel y Europa están unidos en un lazo inquebrantable. Nuestros intereses compartidos, y más aún, nuestros valores compartidos, dictan nuestro presente y dan forma a nuestro futuro”. Hizo un llamado a los eurodiputados y a la UE para que amplíen, profundicen y fortalezcan su asociación para enfrentar mejor los desafíos contemporáneos que enfrentan Israel y la UE, incluida la amenaza que representa Irán para su propio pueblo, para Israel y en el Medio Oriente y Ucrania.
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