“En el contexto de la decisión rusa de llevar a cabo negociaciones serias, de retirar sus fuerzas de Ucrania y devolver los territorios, por supuesto, daría la bienvenida a <…> el alivio de las sanciones”, dijo.
Nuland agregó que el Secretario de Estado Anthony Blinken está en la misma posición.
Por su parte, el jefe de la delegación rusa en las conversaciones de Viena sobre seguridad militar y control de armas, Konstantin Gavrilov, al comentar las palabras del subsecretario de Estado, dijo que no ve la disposición de los estadounidenses para el diálogo.
“Como han declarado nuestros líderes, tanto el presidente como el ministro Lavrov, estamos listos para negociaciones serias sin un centavo en el bolsillo. Pero mientras estoy personalmente aquí en Viena, vemos estas negociaciones, no escucho ninguna de las señales que acaba de enviar Nuland aquí”, dijo.
Rusia ha estado realizando una operación especial militar en Ucrania desde el 24 de febrero. Vladimir Putin llamó a su tarea «la protección de las personas que han sido objeto de intimidación y genocidio por parte del régimen de Kyiv durante ocho años». Según el presidente, el objetivo final de la operación es la liberación de Donbass y la creación de condiciones que garanticen la seguridad de la propia Rusia.
Al mismo tiempo, Putin ha enfatizado repetidamente que Rusia está lista para las negociaciones, ya que no busca hacer girar el volante del conflicto ucraniano, sino ponerle fin. Sin embargo, los países occidentales hablan constantemente sobre la necesidad de continuar con las hostilidades, inflar a Ucrania con armas y entrenar a los combatientes de la APU en su territorio. El Kremlin, por su parte, dijo que el suministro de armas occidentales solo prolonga el conflicto y no es un buen augurio para Ucrania, y el transporte de armas se convierte en un objetivo legítimo para el ejército ruso.