Gustavo Petro tiene prohibido oficialmente el ingreso a territorio peruano
El Congreso de una sola cámara de Perú aprobó la noche del viernes por 72 votos a favor, 29 en contra y 7 abstenciones, la declaración del presidente colombiano, Gustavo Petro, como «persona non grata» por sus declaraciones que equiparan a la policía local con las tropas nazis. La decisión había sido respaldada el martes por el Comité de Asuntos Exteriores del Parlamento.
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La resolución que prohíbe al primer jefe de Estado de izquierda de Colombia ingresar a territorio peruano se suma a las múltiples fricciones internacionales que ha enfrentado la presidenta Dina Boluarte después de su toma de posesión tras el juicio político a Pedro Castillo Terrones el 7 de diciembre.
El fin de semana pasado, Petro se refirió a la movilización de tropas que realizó la Policía Peruana en el centro de Lima, mientras sindicatos y organizaciones sociales se concentraban a pocas cuadras, para protestar contra la presidenta Dina Boluarte.
“Están marchando como nazis contra su propio pueblo, violando la Convención Americana sobre Derechos Humanos”, había dicho Petro sobre los despliegues de la Policía Nacional (PNP) de Perú para neutralizar las manifestaciones populares que exigen la renuncia de Boluarte, nuevas elecciones, una Asamblea Constituyente y la liberación de Castillo. .
El Comité de Relaciones Exteriores emitió entonces una declaración contra Petro, diciendo que “nadie puede ofender [the PNP] diciendo que son tropas nazis”, según la presidenta María del Carmen Alva.
Por ello, el Parlamento peruano tildó de “inaceptables” las declaraciones de Petro y consideró que “constituyen una ofensa a la Policía del Perú, a la República del Perú y, al banalizar el Holocausto, constituyen también una ofensa a todo el pueblo judío”.
Petro, junto a los gobiernos de México, Bolivia y Argentina, expresaron su apoyo a Castillo, quien está detenido desde que intentó disolver el Congreso y gobernar por decreto, lo que desató una ola de manifestaciones que dejó más de 50 muertos.
El Congreso peruano ya había aprobado una moción que rechazaba la “injerencia” en los asuntos internos del país de Petro y del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, quien también otorgó asilo a la familia de Castillo.