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Una red de médicos rumanos está siendo investigada por acusaciones de que reutilizaron implantes cardíacos para pacientes vivos después de haberlos extraído de cadáveres, dijeron los fiscales.
Uno de los médicos fue arrestado por 30 días el sábado por la noche (18 de febrero), dijo un comunicado de los fiscales.
El tribunal de Bucarest ordenó el arresto preventivo del cardiólogo Dan Tesloianu, que trabajaba en un hospital de la ciudad oriental de Iasi, por abuso de autoridad y soborno.
Los fiscales dijeron que desde 2017 hasta 2022 implantó 238 dispositivos médicos “de origen desconocido”, a veces extraídos de pacientes muertos, y los reutilizó ilegalmente, poniendo en riesgo vidas.
Se sospecha que Tesloianu supervisaba una red que incluía al menos a otros cuatro médicos que le proporcionaban los dispositivos, sin la aprobación previa de los pacientes enfermos o sus familias.
“Gran parte de las intervenciones para implantar dispositivos cardíacos no fueron necesarias y fueron desencadenadas por diagnósticos ficticios” o medicamentos que inducirían síntomas específicos, agrega el comunicado difundido el sábado.
El viernes, la policía rumana anunció 24 registros en tres condados en un caso que involucraba a “médicos que realizaron intervenciones quirúrgicas violando los procedimientos y las reglas para el uso de implantes cardíacos”. Como resultado, nueve personas fueron llevadas a audiencias.
Rumania, que se unió a la Unión Europea en 2007, ha visto su sistema de salud pública plagado de múltiples escándalos de corrupción en los últimos años y aún gasta menos en atención médica de todos los países de la UE.
