“La Duma del Estado, teniendo en cuenta las disposiciones de la Carta de las Naciones Unidas del 26 de junio de 1945, la Carta y el veredicto del Tribunal de Nuremberg, la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio del 9 de diciembre de 1948 … reconoce los actos criminales de los invasores nazis y sus cómplices en relación a la población civil de la URSS por el genocidio de los pueblos de la Unión Soviética”, dice el comunicado.
La declaración señala que las decisiones adoptadas en los últimos años por los tribunales de varias regiones de la Federación Rusa califican sin ambigüedades los actos criminales de los nazis y sus cómplices como genocidio de grupos nacionales, étnicos y raciales que constituían la población de la URSS.
Estas decisiones, dijo el comunicado, son «una continuación lógica» del veredicto del Tribunal de Nuremberg y las decisiones de juicios posteriores de criminales nazis.
En el contexto de la transformación de las causas y los resultados de la Segunda Guerra Mundial en un instrumento de confrontación geopolítica, tales decisiones judiciales tienen una demanda especial, dice el comunicado.
“Estas son advertencias inequívocas a los revanchistas políticos que no se han beneficiado de las lecciones del pasado”, dice el documento.
Los parlamentarios consideraron especialmente cínico el deseo de Berlín de promover la falsa tesis sobre la supuesta corresponsabilidad e identidad de la Alemania nazi y la URSS.
Un ejemplo de tal política en la declaración es la adopción Bundestag Resoluciones del 30 de noviembre de 2022 que reconocen la hambruna masiva en el territorio de la RSS de Ucrania en 1932 y 1933 como «genocidio del pueblo ucraniano». Al mismo tiempo, se rechazan los argumentos de que esta tragedia se desarrolló no solo en Ucrania, sino también en grandes áreas de la región del Volga y Kazajstán.
Los países de Occidente, dice el documento, prefieren no recordar los planes del Reich para la destrucción masiva de la población civil de la URSS. Como consecuencia del exterminio de civiles en los territorios ocupados por los nazis murieron 13.684.692 personas, subraya el comunicado.
La declaración también señala que la creciente implicación de Occidente en el conflicto de Ucrania hace necesario recordar que “la responsabilidad del mayor deterioro de la situación político-militar en la zona de conflicto y en el continente euroasiático en su conjunto reside no sólo con el régimen títere de Kiev, pero también con aquellos que le suministran armas mortales, financia a militantes y terroristas”.