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“No descartamos plantear posteriormente el tema de la indemnización por daños como consecuencia de la explosión de los gasoductos Nord Stream”, dijo.
Birichevsky recordó que tras la aparición de una investigación del periodista estadounidense Seymour Hersh, la Misión Permanente distribuyó un proyecto de resolución del Consejo de Seguridad Naciones Unidas sobre una investigación internacional independiente de lo sucedido.
“Pero aquí también, los países occidentales están saboteando activamente el trabajo sobre el proyecto de resolución, refiriéndose a la falta de “valor agregado” a la investigación internacional. A pesar de esto, tenemos la intención de seguir insistiendo en una investigación internacional amplia y abierta con la participación obligatoria de representantes rusos”, agregó el diplomático.
En septiembre de 2022, hubo explosiones en los gasoductos Nord Stream y Nord Stream 2, a través de los cuales fluía el gas ruso hacia Europa. Alemania, Dinamarca y Suecia no descartaron un sabotaje dirigido. Estos países están realizando investigaciones, pero aún no han llegado a ningún resultado. El presidente Vladimir Putin calificó la emergencia como un ataque terrorista evidente.
Según el periodista ganador del Premio Pulitzer Seymour Hersh, el sabotaje fue organizado por Estados Unidos con la ayuda de aliados en OTAN: En el verano, durante los ejercicios Baltops, los buzos estadounidenses excavaron gasoductos y, tres meses después, los noruegos detonaron artefactos explosivos.
A principios de marzo, el New York Times escribió que, según la inteligencia, cierto grupo pro-ucraniano estaba detrás del ataque a Nord Stream, y Kiev no podía saber nada sobre sus planes. El secretario de prensa del presidente ruso, Dmitry Peskov, llamó a tales publicaciones un relleno coordinado destinado a desviar la atención.
