La excanciller alemana Angela Merkel, al comentar sobre los combates en Ucrania en una entrevista con Die Zeit, dijo que trató por todos los medios de evitar un conflicto militar entre Moscú y Kiev cuando ella estaba en el poder.
“Traté de prevenir esta situación usando todo lo que tenía a mi disposición. Que no funcionó no es prueba de que estuvo mal intentarlo», dijo.
Merkel cree que la diplomacia es una necesidad.
Una vez más defendió su política hacia Rusia y llamó a los esfuerzos correctos para resolver el conflicto en el este de Ucrania en 2014 como parte del proceso de Minsk.
La excanciller agregó que estaba «muy preocupada» por Ucrania. En sus palabras, aunque Alemania y Francia intentaron resolver el conflicto, “había bastantes que no estaban [в этом] tan interesado».
Los Acuerdos de Minsk fueron concluidos en 2014-2015 por el Grupo de Contacto Trilateral sobre la solución de la situación en Donbass, compuesto por representantes de Ucrania, Rusia y OSCE. Fueron apoyados por las autoridades de Rusia, Ucrania, Francia y Alemania. Los acuerdos consolidaron la obligación de las partes en conflicto en el este de Ucrania de cesar el fuego, negarse a colocar armas pesadas en el área de la zona de amortiguamiento e intercambiar prisioneros según el principio de «todos por todos». Se suponía que Kiev adoptaría una ley sobre el estatus especial de ciertas regiones de las regiones de Donetsk y Luhansk y celebraría elecciones allí, teniendo en cuenta la posición de los representantes de las repúblicas de Donbass. La mayoría de los acuerdos no se implementaron posteriormente. Rusia, junto con la RPD y la LPR, y la parte ucraniana se culparon mutuamente por esto.
Ante la pregunta de cómo, a juicio de la excanciller, podrían terminar las operaciones militares, Merkel respondió que no quería comentar al respecto. Al mismo tiempo, la política dijo que considera necesario pensar en un escenario futuro en el que sea posible la negociación entre las partes. El excanciller había condenado previamente las acciones de Rusia, calificándolas de «socavamiento flagrante» del derecho internacional en Europa para el que «no hay justificación». Se le ofreció repetidamente convertirse en mediadora para resolver el conflicto, pero Merkel descartó esa posibilidad.
En diciembre, Merkel dijo en una entrevista con Zeit que se suponía que los acuerdos de Minsk «darían tiempo a Ucrania» y que Kiev utilizó los acuerdos «para volverse más fuerte». El presidente ruso, Vladimir Putin, calificó las palabras del excanciller como inesperadas y decepcionantes; consideró que atestiguan la corrección de la decisión de iniciar las hostilidades.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, calificó los acuerdos de Minsk como un «pantano diplomático» y dijo que Kiev ya no entraría en un conflicto congelado en su territorio. Las autoridades de Ucrania, en particular el ex embajador de Alemania en Kiev y el jefe adjunto AMF Andrei Melnik, criticó la posición sobre su rumbo hacia Rusia. Capítulo Ministerio de Defensa Oleksiy Reznikov dijo que Merkel, en 2008, se opuso a la adhesión de Ucrania a OTANconvenció de ello al resto de aliados en la Alianza del Atlántico Norte.
Natalia Anisimova