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Detenciones, protestas y saqueos en Santiago en el aniversario del golpe militar
La tradicional marcha en la capital chilena recordando el golpe incendió un autobús, apedreó otros medios de transporte público, levantó barricadas y luchó con los Carabineros
Unas once personas fueron detenidas en Chile tras los disturbios y saqueos en Santiago en el 48º aniversario del golpe militar encabezado por el general Augusto Pinochet que en septiembre de 1973 derrocó al gobierno del presidente socialista democráticamente electo Salvador Allende.
A pesar de las violentas protestas, el ministro del Interior chileno, Juan Francisco Galli, dijo sentirse orgulloso porque los Carabineros han aprendido la lección. Las medidas de contención impidieron que se extendiera la violencia.
En general, no se produjeron grandes inconvenientes, aunque “grupos minoritarios participaron en disturbios y saqueos”. en el centro de Santiago.
Desde sus inicios la tradicional marcha en la capital chilena recordando el golpe de Estado incendió un autobús, apedreó otros medios de transporte público, levantó barricadas y luchó con los Carabineros. También se produjeron desórdenes y enfrentamientos cerca del Cementerio General donde generalmente concluyen las marchas anuales.
Sin embargo, en la noche volvieron a surgir incidentes en diferentes barrios de Santiago, esta vez con calles cerradas, bombas molotov, algunos saqueos e incluso disparos, según un informe de Carabineros.
Sin embargo, también hubo un lado pacífico, cientos con banderas de Chile y del Partido Comunista marcharon cerca del palacio presidencial La Moneda y depositaron ofrendas florales en el monumento dedicado al ex presidente Allende.
Otros manifestantes pacíficos se reunieron en el Estadio Nacional para una vigilia en honor a las víctimas de la dictadura de diecisiete años. En el evento participaron legisladores y miembros de la Asamblea Constitucional.
El estadio nacional de Santiago fue uno de los principales centros de detención y cámaras de tortura durante los primeros meses del golpe militar. Se cree que unas 3.200 personas fueron asesinadas por los militares mientras que otras 40.000 fueron torturadas y encarceladas.
