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Steve Bannon se encontraba entre las docenas de personas que han sido llamadas a testificar sobre el violento ataque destinado a cerrar el Congreso por las afirmaciones infundadas de Donald Trump de que Joe Biden había ganado las elecciones debido a un fraude electoral masivo.
ARCHIVOS: Steve Bannon. Imagen: AFP
WASHINGTON, Estados Unidos – Un desafiante Steve Bannon, asesor desde hace mucho tiempo del ex presidente Donald Trump, se entregó al FBI el lunes para enfrentar cargos de desacato al Congreso luego de negarse a testificar sobre el asalto al Capitolio del 6 de enero.
«Todo esto es ruido», dijo sobre su acusación, cuando llegó a la oficina de campo del FBI en Washington.
«Quiero que ustedes se mantengan enfocados en el mensaje», dijo, promocionando su sitio web «War Room». «Estamos derribando al régimen de Biden».
El viernes, un gran jurado federal acusó a Bannon, de 67 años, de negarse a testificar o proporcionar documentos al Comité Selecto de la Cámara de Representantes que investiga el violento ataque al Congreso de Estados Unidos por partidarios de Trump.
Los investigadores creen que Bannon y otros asistentes y asesores de Trump podrían tener información sobre los vínculos entre la Casa Blanca y la mafia que invadió el Capitolio, el día en que debía certificar a Joe Biden como ganador de las elecciones presidenciales de noviembre de 2020.
Bannon fue acusado de dos cargos de desacato, cada uno con una pena de un mes a un año de cárcel.
La acusación fue una victoria significativa para el Comité Selecto de la Cámara, que está luchando contra los esfuerzos de Trump por usar el privilegio presidencial para impedir que el comité obtenga el testimonio y los documentos necesarios para la investigación.
«La acusación de Steve Bannon debería enviar un mensaje claro a cualquiera que crea que puede ignorar al Comité Selecto o tratar de obstaculizar nuestra investigación: nadie está por encima de la ley», dijeron el presidente del comité Bennie Thompson y la vicepresidenta Liz Cheney en un comunicado.
Bannon, quien asesoró a Trump sobre tácticas políticas durante años, debía comparecer ante el tribunal a través de un enlace de video más tarde el lunes para una lectura de cargos y probablemente sea liberado bajo fianza.
BATALLA POR EL PRIVILEGIO EJECUTIVO
Bannon se encontraba entre las docenas de personas que han sido llamadas a testificar sobre el violento ataque destinado a cerrar el Congreso por las afirmaciones infundadas de Trump de que Biden había ganado las elecciones debido a un fraude electoral masivo.
El ataque, durante el cual murieron cinco personas, logró retrasar la sesión de certificación de las elecciones conjuntas entre la Cámara y el Senado durante varias horas.
El comité dice que ya ha entrevistado u obtenido documentos de más de 150 personas y ha exigido el testimonio de varios de los principales ayudantes de Trump.
Un testigo clave, el exjefe de gabinete de Trump, Mark Meadows, también podría enfrentar cargos de desacato luego de negarse a ser entrevistado por el comité el viernes.
Los casos de Bannon y Meadows podrían depender de una pelea judicial en curso entre el comité y Trump por el privilegio ejecutivo.
Trump está luchando contra la solicitud del comité de documentos de su administración ahora en los Archivos Nacionales.
Después de que Biden, como presidente en funciones, renunció al privilegio sobre los documentos, la corte federal en Washington rechazó el desafío de Trump.
Trump ha apelado desde entonces, y el caso, que podría ir a la Corte Suprema, ahora se centra en posturas de privilegio enfrentadas nunca antes probadas por un ex presidente en ejercicio.
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