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TOKIO: Los precios básicos al consumidor en Tokio, un indicador adelantado de la inflación nacional de Japón, probablemente aumentaron en noviembre al ritmo más rápido en más de un año, mostró una encuesta de Reuters, una señal de que las empresas estaban comenzando a traspasar los mayores costos de energía y materias primas.
El índice básico de precios al consumidor (IPC), que incluye la energía pero excluye los precios de los alimentos frescos, subió un 0,4% en la capital de Japón en el año hasta noviembre, el ritmo de aumento más rápido desde julio de 2020, mostró la encuesta de 17 economistas. El índice básico del IPC de Tokio subió un 0,1% en octubre.
Si bien esos datos sugerirían un repunte del IPC básico nacional de Japón, la última lectura del 0,1% en octubre todavía estaba muy por debajo del objetivo del 2% del banco central.
«A diferencia de Europa y Estados Unidos, Japón no ha experimentado un fuerte repunte de la demanda después del levantamiento de las restricciones del COVID-19», dijo Takeshi Minami, economista jefe del Instituto de Investigación Norinchukin. «La tasa de inflación probablemente se acelerará, pero solo a un ritmo modesto».
Los analistas esperan que la inflación al consumidor de Japón se recupere en los próximos meses debido al aumento de los costos del combustible, pero no tan abruptamente como en otros países, ya que el débil gasto de los hogares desalienta a las empresas a subir los precios.
El gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda, dijo el lunes que la inflación se acelerará a alrededor del 1 por ciento en la primera mitad de 2022 a medida que la economía se recupere a niveles previos a la pandemia.
Eso todavía dejará la inflación muy por debajo del objetivo del BOJ, lo que sugiere que es probable que el banco central mantenga la política monetaria muy flexible.
El gobierno dará a conocer los datos del IPC de Tokio de noviembre el 26 de noviembre a las 8:30 am (25 de noviembre a las 23:30 GMT).
(Reporte de Kantaro Komiya; Editado por Ana Nicolaci da Costa)
