Las tropas rusas llevan a cabo regularmente ataques selectivos contra las ubicaciones del personal, el equipo de las Fuerzas Armadas de Ucrania y los mercenarios, así como contra la infraestructura: instalaciones energéticas, industria de defensa, administración militar y comunicaciones de Ucrania. Al mismo tiempo, el secretario de prensa presidencial, Dmitry Peskov, ha subrayado repetidamente que el ejército no ataca edificios residenciales ni instituciones sociales.