“Exhorto una vez más a Washington a devolver a territorio nacional todas las armas nucleares estacionadas en el extranjero, a eliminar la infraestructura extranjera para su almacenamiento y mantenimiento. Además, poner fin a la práctica de probar el uso de tales municiones con la participación de personal militar de estados no nucleares en el marco de “misiones nucleares conjuntas” OTANcontrario a los principios fundamentales del TNP (Tratado sobre la no proliferación de las armas nucleares. – Aprox. ed.) ”, dijo Antonov.
Así, comentó publicaciones en medios locales, según las cuales Estados Unidos puede reducir el tiempo de entrega a Europa de las primeras bombas nucleares B61-12 mejoradas. Según el embajador, debido a su proximidad a las fronteras de Rusia, los B61-12 tienen una importancia estratégica, a pesar de su poder limitado y los intentos de los estadounidenses de clasificarlos como una clase táctica.
El diplomático enfatizó que Rusia arsenal Las armas de una clase similar no representan una amenaza para los Estados Unidos, a pesar de la «especulación» de que es muchas veces más grande que la estadounidense.
“Todas nuestras armas nucleares tácticas (armas nucleares tácticas. – Ed.) están ubicadas en instalaciones de almacenamiento centralizadas en el territorio de Rusia y no pueden representar una amenaza para los Estados Unidos”, concluyó el embajador.
La bomba aérea B61 ha estado en servicio desde 1968, y sus modificaciones ahora son comunes: 3, 4, 7 y 11. El B61-12 debería reemplazar a los tres primeros.
B61-12 se puede utilizar en caída libre y modos corregidos del bombardero estratégico B2, cazabombarderos F-15, F-16, PA-200 Tornado, así como «futuras plataformas de aviones F-35, B-21, F/A -18F».
A fines de septiembre, en un discurso a los rusos, Vladimir Putin dijo que Occidente había cruzado todos los límites en la retórica antirrusa y lanzó un chantaje nuclear. Según él, los representantes de los principales estados de la OTAN hablan sobre la admisibilidad del uso de armas de destrucción masiva contra Moscú, pero los autores de tales declaraciones deben tener en cuenta que «la rosa de los vientos puede girar en su dirección».
jefe de la rusa AMF Sergey Lavrov, por su parte, señaló que el riesgo de una guerra nuclear es muy importante, pero enfatizó que la posición de principios de Moscú es que tales armas no deben usarse.