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Autoridades peruanas elevan medidas de seguridad mientras manifestantes marchan por Lima
La situación en el país es tan inestable que el estatal Instituto Peruano del Deporte decidió posponer el inicio del torneo de fútbol local
Más de 11.000 agentes de la ley se desplegaron el jueves en la capital de Perú y el cercano puerto de Callao mientras los manifestantes antigubernamentales se preparaban para organizar la llamada Toma de Lima.
Los manifestantes exigen la renuncia de la presidenta Dina Boluarte, además de nuevas elecciones y una asamblea constituyente.
Unos 11.800 policías formarán parte del contingente de seguridad para monitorear las protestas, según el jefe de la
El jefe de la Policía de Lima, Víctor Zanabria, dijo que se movilizaron 11.800 efectivos bajo la coordinación de la Dirección de Prevención del Delito de la Fiscalía a cargo de Alfonso Barrenechea, además de unos 50 subprocuradores provinciales.
El operativo de seguridad también incluye 196 cámaras activas en toda la ciudad, según el diario La República. Se informó que dos manifestantes más murieron el miércoles en enfrentamientos entre manifestantes y la policía en bloqueos de carreteras en las afueras de Lima.
El Ministerio de Salud de Perú ha declarado hospitales y otros centros de salud en alerta roja, ya que se han producido cerca de 50 muertes desde que estalló la violencia en todo el país tras la destitución del expresidente Pedro Castillo Terrones, quien se encuentra en prisión preventiva por intentar disolver el Congreso y gobernar por decreto. .
La situación en el país es tan inestable que el estatal Instituto Peruano del Deporte decidió postergar el inicio del torneo local de fútbol “para prevenir riesgos que afecten la seguridad e integridad física de las personas”, se anunció. La competencia comenzaría el sábado con un partido entre Sporting Cristal y Deportivo Cantolao. La medida estará vigente hasta el 23 de enero. Hasta el momento, ocho equipos se han negado a jugar en medio de la agitación actual.
A principios de esta semana, Boluarte dijo que estaba dispuesta a dialogar con quienes querían que renunciara. “Sabemos que se quieren apoderar de Lima, por todo lo que está saliendo en las redes. Los llamo a tomar Lima, sí, pero en paz, con calma. Los espero en Casa de Gobierno para poder hablar de las agendas sociales que tienen”, dijo.
