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Los líderes de los grupos parlamentarios en Bulgaria han acogido con satisfacción la decisión de la UE de iniciar conversaciones de adhesión con Albania y bloquear a Macedonia del Norte hasta que incluya a la minoría búlgara en su constitución.
“Paciencia es lo que se requiere de nosotros. No debemos parecer agresivos porque la táctica de nuestros colegas en la República de Macedonia del Norte es culparnos (por su fracaso con la UE)”, dijo a los periodistas en el parlamento Boyko Borissov (PPE), líder del mayor partido de Bulgaria, GERB.
Borissov, que preside la comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento, dijo que intentaría persuadir a sus colegas de otros partidos «para que no actúen de forma emocional, sino fría y razonable» hacia Skopje.
Hace diez días estalló otro gran escándalo entre Sofía y Skopje después de que no se izara la bandera de Macedonia del Norte durante una reunión informal entre los presidentes de los dos países.
El viceprimer ministro de Macedonia del Norte, Aleksandar Nikoloski, calificó al presidente búlgaro, Rumen Radev, de «incivilizado». Inmediatamente después, el GERB anunció que podría exigir la expulsión del partido gobernante de Macedonia del Norte, el VMRO-DPMNE, del Partido Popular Europeo.
”El refrán dice que la venganza es un plato que se sirve frío. Nosotros como país tenemos que mantener la cabeza alta y no adoptar el tono de algún ministro”, añadió el líder del GERB.
Kiril Petkov, colíder de la coalición proeuropea PP-DB, segunda fuerza en el Parlamento, afirmó que toda la Unión Europea está del lado de Bulgaria en la disputa con Macedonia del Norte.
«La República de Macedonia del Norte debe decidir si acepta a los búlgaros en su Constitución o si se le cierra el camino hacia Europa», afirmó.
Petkov expresó la esperanza de que Macedonia del Norte reconsidere su posición ahora que Albania avanza más rápidamente por el camino de la UE.
La decisión del Coreper también fue bien recibida por los partidos prorrusos del Parlamento.
Borislav Gutsanov, del Partido Socialista Búlgaro (PSE), prorruso, dijo que se trataba de “una reacción normal de Bruselas tras la declaración de Macedonia del Norte. No se puede tener ese vocabulario, tanto odio y esperar ser un Estado miembro de la UE”.
El partido radical prorruso Revival (Soberanistas), cuyo líder Kostadin Kostadinov habla a menudo de la salida de Bulgaria de la UE, también celebró la decisión de Bruselas.
“La decisión de Albania de iniciar las negociaciones reales para su membresía en la UE fue legítima, incluso tardía. A partir de ahora, Macedonia del Norte tiene dos caminos a seguir: o reconoce la presencia de los búlgaros como el principal elemento de construcción del Estado de su país y los incluye en su constitución, o se mantiene al margen del proceso de negociación”, afirmó.
Toshko Yordanov, del partido populista Existe una nación así (ECR), afirmó que Macedonia del Norte permanecería fuera de la UE si no cambia su comportamiento hacia Bulgaria.
«La República de Macedonia del Norte no cumple los compromisos que ella misma firmó en el marco de negociación para la adhesión a la Unión Europea», afirmó Yordanov.
(Krassen Nikolov | Euractiv.bg)
