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Colombia suspende cese al fuego con disidentes de las FARC tras 4 asesinatos
“Reclutar y asesinar a niños, niñas y adolescentes de comunidades indígenas no son precisamente gestos de buena voluntad para lograr la paz”, dijo la Defensoría del Pueblo Camargo
Las autoridades colombianas anunciaron este lunes la suspensión unilateral del cese al fuego con las disidentes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), conocidas como Estado Mayor Central (EMC-FARC), tras el reclutamiento y asesinato de cuatro niños de la comunidad indígena Murui, se informó. en Bogotá.
“Después de escuchar a los delegados de las comunidades y al Consejo Extraordinario de Seguridad -y debido a la grave violación al Derecho Internacional Humanitario por parte de este organismo al margen de la ley, sumado a otros hechos que generan incertidumbre y zozobra en la población-, el Gobierno tomó la decisión unilateral decisión de suspender parcialmente los efectos del Decreto 2656 de 2022”, dijo el gobierno del presidente Gustavo Petro en un comunicado.
La nota fechada el domingo menciona que la “atroz” matanza de niños de entre 14 y 16 años en el departamento de Putumayo fue una “bofetada a la paz” por parte del grupo armado. Posteriormente, los delegados de las EMC-FARC fueron convocados a una reunión, pero no asistieron.
“En consecuencia, se informa que se suspende el cese al fuego bilateral que actualmente existía con este grupo armado en los departamentos de Meta, Caquetá, Guaviare y Putumayo y se reactivan las operaciones ofensivas”, prosigue el documento firmado por Petro. “La decisión entrará en vigencia en las próximas 72 horas”, agregó.
El gobierno colombiano reconoció, por otra parte, la efectividad del cese al fuego bilateral en otros territorios donde se puede comprobar que se han evitado daños en la vida de los habitantes y aseguró que acompañará a las comunidades que claman por la paz en su territorios y que estará presente de manera integral en todo el país.
“Se invita a la EMC-FARC a ratificar la participación de sus delegados en los mecanismos locales en los que se mantenga vigente el cese al fuego”, insistió el comunicado.
Según el Defensor del Pueblo Carlos Camargo, los menores fueron reclutados forzadamente en la zona rural de Leguízamo (Putumayo) por el Frente de Disidencia 1 Carolina Ramírez de las Farc y asesinados tras desertar.
“Reclutar y asesinar a niños, niñas y adolescentes de comunidades indígenas no son precisamente gestos de buena voluntad para lograr la paz. Además de ser claras violaciones al Derecho Internacional Humanitario, lo que genera es rechazo social y desconfianza hacia los grupos armados que dicen tener intenciones de dialogar con el gobierno de cara a un proceso de negociación”, dijo Camargo.
Según datos de monitoreo de riesgo del Sistema Integral para la Paz, de enero a mayo de 2023 se han reportado 63 casos de reclutamiento de niños por parte de grupos como el Clan del Golfo, disidencias de las FARC y guerrilleros del ELN.
Como parte de su política de paz total, el gobierno de Petro incluyó a los disidentes de la extinta guerrilla de las FARC en un proceso de diálogo para poner fin al conflicto armado en el país. Encabezados por alias “Iván Mordisco”, estos disidentes cuentan con 3.200 miembros y presencia en al menos 16 departamentos de Colombia.
(Fuente: Xinhua)
