Correa dice que el plebiscito de Noboa fue una derrota disfrazada de victoria
El exjefe de Estado ecuatoriano Rafael Correa dijo desde el exilio para evitar una pena de prisión por corrupción que el referéndum celebrado en su país el pasado domingo en el que el actual presidente Daniel Noboa recibió un amplio apoyo a nueve preguntas relativas a temas de seguridad y fortalecimiento de la lucha contra el crimen organizado fue “un triunfo”. ” para el pueblo de cara a las elecciones de 2025 y una “derrota contundente” para el gobierno.
Correa dijo a Efe que la propuesta de Noboa de crear contratos laborales por horas para incentivar la creación de empleo y permitir el arbitraje internacional en cualquier jurisdicción como forma de atraer inversión extranjera no había sido avalada y que esos puntos eran los que más le importaban al líder conservador porque eran “parte del acuerdo con el [International Monetary] Fondo.» El político de izquierda afirmó que los otros nueve puntos referentes a la lucha contra el crimen organizado eran “preguntas gancho para decir que tiene apoyo popular”.
El político de Revolución Ciudadana también criticó a Noboa por el asalto a la Embajada de México para capturar al exvicepresidente Jorge Glas, quien había pedido asilo allí. El gobierno de Noboa argumentó que no se podía conceder asilo a fugitivos condenados por corrupción.
Para Correa, Noboa quería convertir el plebiscito en un trampolín para su campaña de reelección presidencial el próximo año «con fondos del pueblo ecuatoriano».
“Le han dado apoyo a la parte de seguridad y ahora no tendrá pretexto alguno”, insistió Correa al recordar que Noboa nunca esperó llegar a la presidencia pero se vio favorecido por el asesinato del candidato Fernando Villavicencio. Noboa llegó al poder en noviembre de 2023, para completar el mandato del renunciante Guillermo Lasso y ahora siente que tiene suficiente apoyo popular para postularse para un mandato completo.
Respecto al involucramiento de las Fuerzas Armadas en la lucha contra el crimen organizado, 7 de cada 10 personas que asistieron a la consulta, respondieron favorablemente en un Ecuador devastado por la violencia.