El miembro de la Liga Provincial (MPL) de la Alianza Democrática (DA), Jack Bloom, se reunió con el director ejecutivo interino del hospital, Mohlamme Mathabathe, para averiguar si los productos se entregaron efectivamente al hospital.
DA Gauteng MPL Jack Bloom anunció medidas para responsabilizar personalmente a los culpables de Life Esidimeni por el laudo arbitral de R159 millones. Imagen: @DA_GPL/Twitter
JOHANNESBURGO – Gerencia del Hospital Tembisa dijo que los errores tipográficos estaban detrás de una supuesta ola de compras de equipos sobrevaluados.
Los informes sugieren que el hospital compró 200 jeans ajustados, 230 toallitas faciales y 100 sillones de cuero.
El MEC de salud en la sombra de la Alianza Democrática (DA), Jack Bloom, se reunió el miércoles con el director ejecutivo interino del hospital, Mohlamme Mathabathe, para averiguar si los productos fueron realmente entregados al hospital.
Hospital de Tembisa negó la compra de 200 vaqueros pitillo valorados en R2.500 cada uno.
El año pasado, antes de la tercera ola de COVID-19 en junio, el hospital supuestamente gastó R500,000 en jeans ajustados.
El hospital dijo que los jeans ajustados eran un error de tipeo y que ordenaron suturas quirúrgicas para coser a los heridos.
Mathabathe le dijo al fiscal del distrito que la confusión se debió a errores de codificación.
Bloom no estaba convencido y cuestionó los errores del hospital.
“Nos han dado una explicación, error de codificación, que creo que es muy débil porque se cometieron muchos otros ‘errores de codificación’ de citas. Creo que el problema es que si no pueden codificar bien, ¿qué más no están haciendo bien?”.
Asimismo, los cubrebocas y los sillones de lujo también fueron codificados incorrectamente – dijo el hospital.
Agregó sillas de oficina estándar, utilizadas por las enfermeras en la UCI, y en su lugar se entregaron paños de papel al hospital.
“Acabo de visitar la UCI y no son para nada unos sillones. En realidad, son una especie de sillas ajustables y ciertamente no deberían haber costado tanto como R5,000 cada una”.
Cuando se le preguntó por qué había tantos errores de codificación, el equipo de comunicaciones se negó a comentar.