PyE
TAIPEI: El banco central de Taiwán dijo el miércoles (28 de septiembre) que no adoptará medidas de control de divisas y que las medidas de gestión de divisas son suficientes para mantener la estabilidad del mercado financiero.
El dólar de Taiwán, al igual que otras monedas asiáticas importantes, se ha depreciado considerablemente en las últimas semanas debido a los agresivos aumentos de las tasas de interés en los Estados Unidos y la fortaleza del dólar estadounidense, así como a las preocupaciones sobre la desaceleración del crecimiento económico mundial.
Ha perdido un 13 por ciento en lo que va del año frente al dólar, aunque las monedas de otros dos grandes competidores exportadores, Japón y Corea del Sur, se han debilitado aún más.
El banco central dijo en un comunicado que si bien hubo salidas de capital extranjero del mercado bursátil en el contexto de alzas de tasas en Estados Unidos y caídas del mercado global, el mercado cambiario estaba operando sin problemas y se mantuvo estable.
Taiwán nunca ha implementado controles de cambio de divisas y las medidas de gestión de divisas son suficientes para mantener la estabilidad del mercado financiero, agregó.
Si otra subida de tipos en Estados Unidos provoca una gran salida de capital extranjero, el banco dijo que tiene suficiente capacidad para responder a las fluctuaciones en el mercado de divisas.
«El banco no adoptará medidas de control de divisas», agregó.
El banco dijo que emitió el comunicado después de que los comentarios de su gobernador, Yang Chin-long, el martes en el Parlamento fueran mal informados cuando respondía a preguntas teóricas sobre las tensiones con China o los grandes aumentos de tasas en Estados Unidos que causaron una gran y repentina salida de capital extranjero.
En su declaración, el banco destacó las grandes reservas de divisas de Taiwan, la sólida balanza de pagos, el superávit comercial y los muy bajos niveles de deuda externa.
Durante crisis financieras internacionales anteriores, por ejemplo en 1997 y 2008, el banco dijo que adoptó políticas monetarias flexibles y efectivas y medidas de gestión de divisas para «estabilizar el mercado y permitir que Taiwán supere las crisis de manera segura».
