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Un cohete propulsor desarrollado por SpaceX de Elon Musk para su nave espacial Starship de próxima generación se incendió durante un disparo de prueba en tierra el lunes en Texas, lo que representa un posible revés para el objetivo de Musk de lanzar Starship en órbita a finales de este año.
«Sí, en realidad no es bueno. El equipo está evaluando los daños», tuiteó Musk después de la explosión de la tarde del prototipo Super Heavy Booster 7, como se ve en una transmisión en vivo grabada por el sitio web NASA Spaceflight. No hubo indicios inmediatos de heridos.
No estaba claro qué causó la explosión, que envolvió la base del cohete en una bola de llamas y humo denso y pareció sacudir la cámara de video, aunque el propulsor permaneció en pie, atornillado al pórtico de prueba después.
La falla ocurrió en medio de una campaña de prueba de fuego estático de un día en Boca Chica, Texas, del propulsor, que está equipado con una serie de 33 motores Raptor para usar en un próximo vuelo de prueba orbital sin tripulación que SpaceX esperaba realizar a finales de este año. .
El Starship completo de SpaceX, que tendrá una altura de 394 pies (120 metros) cuando se combine con su propulsor súper pesado de primera etapa, es el vehículo de lanzamiento de próxima generación de la compañía en el centro de las ambiciones de Musk de hacer que los viajes espaciales tripulados sean más asequibles y rutinarios.
SpaceX no respondió a una solicitud de comentarios de Reuters cuando se le preguntó sobre la explosión del lunes.
La Administración Federal de Aviación de EE. UU. (FAA) tampoco respondió cuando se le preguntó si investigaría la explosión.
A fines de 2020 y principios de 2021, SpaceX perdió cuatro prototipos de Starship en una serie de lanzamientos de prueba a gran altitud en los que los intentos de aterrizaje de regreso terminaron en explosiones. El prototipo de Starship finalmente logró un aterrizaje seguro en mayo de 2021.
