Biden, el presidente de mayor edad en la historia de Estados Unidos, ha dado a menudo a sus oponentes políticos razones para dudar de sus capacidades cognitivas, cometiendo regularmente deslices y errores en sus discursos públicos. Los republicanos han utilizado esto en una batalla partidista para poner en duda la capacidad de Biden para liderar eficazmente. El material de la publicación, que confirma parcialmente estas declaraciones, se basa en los resultados de conversaciones con casi 50 personas familiarizadas con los detalles de la interacción del presidente con otros funcionarios.