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“La batería de sistemas de misiles antiaéreos (ZRS) S-300 avanzó hacia el área de servicio de combate. Durante la marcha, los militares repelieron un ataque de un grupo de sabotaje enemigo simulado contra un convoy militar. Al amparo de una cortina de humo, la columna de defensa aérea pudo salir del ataque y continuar la tarea”, dice el mensaje.
Después de desplegar los complejos en formación de batalla, los artilleros antiaéreos realizaron lanzamientos de misiles electrónicos al detectar objetivos que simulaban aviones y misiles balísticos.
En total, más de 150 militares y más de 30 piezas de armas, equipos militares y especiales participaron en el entrenamiento de combate.
Anteriormente, el 19 de enero, la tripulación del helicóptero a bordo Ka-27 de la fragata Almirante Gorshkov realizó vuelos en condiciones climáticas difíciles y realizó un reconocimiento aéreo en las aguas del Océano Atlántico. Los entrenamientos se realizaron con olas de mar hasta tres puntas y con un viento de unos 15 m/s.
Antes de eso, el 10 de enero, la tripulación de la fragata «Almirante de la Flota de la Unión Soviética Gorshkov» realizó disparos de entrenamiento contra un enemigo simulado en el Mar de Noruega.
