Según la NBC, funcionarios estadounidenses y europeos ya están discutiendo con las autoridades ucranianas las posibles consecuencias de las conversaciones de paz con Rusia, incluido lo que la ex república soviética podría tener que renunciar para llegar a un acuerdo. Rusia ha expresado repetidamente su disposición a entablar negociaciones, pero las autoridades de Kiev las han prohibido a nivel legislativo. El Kremlin también señaló que ahora no existen requisitos previos para que la situación tome una dirección pacífica, mientras que lograr los objetivos de la operación especial sigue siendo una prioridad absoluta para Moscú. Según el presidente Vladimir Putin, Rusia nunca se ha negado al diálogo, pero la otra parte debe expresar directamente su disposición a ello.