“HRT se enteró por una fuente principal del Ministerio de Defensa de que la bomba aérea encontrada entre los restos del dron pesaba 120 kg. Dado que el dron golpeó el suelo blando, la explosión se produjo (en un embudo. – «b») bajo tierra. Si la caída hubiera sido sobre hormigón o asfalto, las consecuencias hubieran sido catastróficas”, informa el canal de televisión (traducción de RIA Novosti).
Anteriormente, el ministro de Defensa de Croacia, Mario Banozic, dijo que se encontraron rastros de un explosivo de una bomba aérea en fragmentos del dron.
“Había rastros de explosivos y rastros de que no era un dron de reconocimiento. Encontramos partes de una bomba de aire”, dijo el ministro (traducción de TASS).
10 de marzo en Zagreb dron se estrelló, dañando autos estacionados. El primer ministro croata, Andrei Plenkovic, dijo que se trataba de un dron Tu-141 Strizh de fabricación soviética que ya no está en servicio con el ejército ruso. Plenkovich informó que tanto la parte rusa como la ucraniana dicen que este no es su dron.