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El partido de extrema izquierda alemán Linke dijo el domingo (18 de agosto) que reemplazará a su dúo de liderazgo a finales de este año mientras lucha por superar una crisis «existencial» tras una serie de reveses.
Janine Wissler y Martin Schirdewan anunciaron en un comunicado que no se postularán para otro período como co-líderes en el congreso del partido Linke’s en octubre.
«Me doy cuenta de que en algunos sectores del partido existe el deseo de un nuevo comienzo en términos de personal», dijo Wissler.
Su decisión de dimitir llega después de que el Linke, que tiene sus raíces tanto en el comunismo de Alemania del Este como en el movimiento obrero de Alemania Occidental, cayera por debajo del tres por ciento en las elecciones al Parlamento Europeo de junio.
El partido Linke, que en las elecciones de 2021 logró entrar por poco en el Parlamento alemán, lleva mucho tiempo dividido por conflictos internos.
Pero recibió un duro golpe cuando la popular legisladora Sahra Wagenknecht desertó el año pasado para formar un nuevo partido populista de izquierda, llevándose consigo a nueve diputados de Linke.
La Alianza Sahra Wagenknecht (BSW) superó a Linke en las elecciones europeas, y las encuestas sugieren que Linke quedará detrás del advenedizo en las elecciones regionales en tres estados del este de Alemania el próximo mes.
Reconociendo la agitación, el comité ejecutivo del Linke adoptó el sábado una moción antes del congreso de octubre afirmando que el partido estaba «sin duda en una situación peligrosa que plantea una amenaza existencial».
El partido “necesita nuevas perspectivas y pasión” para impulsar la “renovación necesaria”, dijo Schirdewan el domingo.
Wissler ha codirigido el partido Linke desde 2021 y Schirdewan se unió a ella un año después.
La política incendiaria Wagenknecht abandonó el partido después de chocar con miembros de alto rango de Linke por su postura dura sobre la inmigración. También quiere que Alemania deje de suministrar armas a Ucrania.
Los analistas dicen que el BSW, que se describe a sí mismo como de izquierda y conservador, no solo apunta a los partidarios de extrema izquierda, sino que también intenta alejar a los votantes que protestan del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania con su retórica antiinmigratoria y antiestablishment.
