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SEÚL: Las exportaciones de Corea del Sur en diciembre cayeron respecto al año anterior por tercer mes consecutivo, según mostraron los datos el domingo, con el panorama empañado por una economía china que lucha contra un aumento en los casos de COVID-19 en un momento de desaceleración del crecimiento mundial.
Corea del Sur es la primera gran economía exportadora en publicar datos comerciales cada mes, lo que brinda una visión preliminar del estado de la demanda mundial.
Los datos del Ministerio de Comercio mostraron que las exportaciones cayeron en diciembre un 9,5 por ciento respecto al año anterior, ya que las fuertes caídas en los envíos a China y el sudeste asiático compensaron con creces el modesto crecimiento de las ventas a Estados Unidos y la Unión Europea.
El declive fue levemente inferior a una caída promedio del 10,1% pronosticada en una encuesta de Reuters y una caída del 14,0% en noviembre, pero marcó un tercer mes consecutivo de caídas, el período más largo desde finales de 2020.
El presidente Yoon Suk-yeol dijo en su discurso de Año Nuevo que su gobierno haría del impulso de las exportaciones una prioridad política principal en 2023, diciendo que las exportaciones son la base y la fuente de empleos para la economía dependiente del comercio.
«Debemos superar la compleja crisis a través de las exportaciones», dijo Yoon durante el discurso televisado, señalando una economía global que enfrenta una combinación de muchas y diversas fuentes de inestabilidad que van desde la oferta, la demanda y factores políticos.
El Ministerio de Comercio ha dicho que brindará un fuerte apoyo político a los exportadores para evitar una disminución de las exportaciones en 2023, que el gobierno proyecta oficialmente que caerán un 4,5 por ciento debido a la desaceleración económica mundial.
Las exportaciones para todo el año 2022 aumentaron un 6,1 % hasta los 683 900 millones de dólares, pero las importaciones aumentaron un 18,9 % hasta los 731 200 millones de dólares, lo que resultó en un déficit comercial récord de 47 200 millones de dólares.
Los datos oficiales de China mostraron el sábado que la actividad de las fábricas se contrajo en diciembre al ritmo más pronunciado desde que surgió la pandemia hace tres años tras la decisión de abandonar su estricta política de cero COVID que desencadenó una ola de infecciones.
