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TOKIO: El primer ministro japonés, Fumio Kishida, ordenó el martes a su gobierno que elabore un plan económico y fiscal a largo plazo, poniendo fin a casi dos décadas de caída de precios y estancamiento económico.
«Japón enfrenta ahora grandes oportunidades para salir de la economía centrada en la reducción de costos y entrar en una nueva etapa», dijo Kishida en el Consejo de Política Económica y Fiscal (CEFP).
El nuevo plan, que abarcará seis años a partir de abril de 2025, promoverá la productividad y la inversión para lograr de manera estable un crecimiento anual real de más del 1 por ciento mientras se reconstruye la salud fiscal, dijo Kishida, sin dar más detalles financieros.
Reuters informó por primera vez sobre el plan la semana pasada, citando dos fuentes con conocimiento directo del asunto.
El plan se incluirá en un esquema de política clave de mitad de año que se entregará a finales de este mes.
Kishida hizo el llamado después de que miembros del sector privado del panel gubernamental clave recomendaran tal plan.
«En el nuevo marco de mediano plazo, deberíamos llevar a Japón a una nueva etapa, expandiendo así la economía y logrando tanto la revitalización económica como la consolidación fiscal», dijeron en un comunicado.
En una medida histórica en marzo, el Banco de Japón puso fin a ocho años de tasas de interés negativas y otros restos de su estímulo radical, al considerar que estaba a la vista el logro sostenido de su objetivo de inflación del 2 por ciento.
Como las tasas más altas podrían aumentar la carga del pago de intereses sobre las deudas gubernamentales, los miembros también pidieron al gobierno que se apegue a su objetivo de lograr un superávit presupuestario primario para el final del año fiscal en marzo de 2026 y que establezca un nuevo objetivo más allá para restaurar la salud fiscal.
