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JERUSALÉN: El sector tecnológico de Israel se ha mantenido resistente durante una guerra de un año con el grupo islamista palestino Hamas, pero como depende de grandes empresas y de la inversión extranjera, el sector enfrenta una incertidumbre financiera que podría dañar a la economía en general, mostró un informe del gobierno el lunes.
Desde que comenzó la guerra el 7 de octubre, las empresas tecnológicas israelíes han recaudado unos 9.000 millones de dólares, el tercer puesto detrás de Silicon Valley y Nueva York, según la Autoridad de Innovación de Israel (IIA), financiada por el Estado.
«El nivel de inversión fue prácticamente el mismo que en el mismo período antes de la guerra», dijo a Reuters Dror Bin, director ejecutivo de IIA. «Por eso, a pesar de que aumentó el riesgo de las inversiones en Israel, todavía ven el potencial de esas empresas emergentes y siguen invirtiendo en ellas».
La alta tecnología impulsa la economía de Israel y representa el 16 por ciento del empleo, más de la mitad de las exportaciones del país, un tercio de los impuestos sobre la renta y el 20 por ciento de su producción económica total.
Bin expresó su preocupación por el estancamiento del empleo en el sector, lo que podría frenar el impuesto sobre la renta cuando el Estado necesite fondos para financiar la guerra.
Al mismo tiempo, la mayor parte de la inversión se destina a empresas emergentes maduras y firmas de ciberseguridad, mientras que otras áreas están sufriendo. «Estamos ante algo que podría convertirse en un problema», dijo Bin, y agregó que muchas buenas empresas que deberían recibir financiación están teniendo problemas actualmente.
Con ese fin, el IIA cuenta con una serie de programas destinados a ayudar a las pequeñas empresas emergentes a mantenerse a flote.
La guerra, dijo Bin, parece crear un «baby boom» de nuevas empresas de tecnología de defensa una vez que termine.
«Los fundamentos del sector tecnológico son los mismos que antes de la guerra», afirmó. «Una vez que esta guerra termine, veremos una recuperación».
El informe del IIA sigue a uno de principios de septiembre de la organización sin fines de lucro Startup Nation Central (SNC), que dijo que las empresas tecnológicas más grandes seguían prosperando, pero advirtió sobre la sostenibilidad del sector debido al conflicto prolongado y la política económica del actual gobierno israelí «que es ampliamente percibida como destructiva».
Los medios israelíes informaron esta semana que el presupuesto de 2025 reduciría los incentivos fiscales para los inversores extranjeros en tecnología.
