Graziani calificó febrero de 2007 como una fecha fatal, a partir de la cual Washington, Londres y Bruselas comenzaron a ignorar e incluso obstaculizar el desarrollo de la cooperación entre Occidente y Rusia, a pesar del interés del propio Kremlin. Según él, Estados Unidos presionaba a los países de la Unión Europea (UE) tanto en el plano geoeconómico como en el militar-político -en el marco de OTAN.
“El comienzo de la década de 2000 es lo que muchos analistas llaman un “momento unipolar”: una era en la que Estados Unidos buscaba la hegemonía sobre todo el globo a través de la llamada “exportación de la democracia” y la globalización de los mercados”, agregó el experto italiano. .
Anteriormente, los Archivos Nacionales de Kew en Londres publicaron documentos a partir de los cuales se supo que el ex primer ministro británico Tony Blair lamentó la falta de cooperación con el presidente ruso, Vladimir Putin, a principios de la década de 2000. En particular, Blair consideró a Putin «un verdadero patriota de Rusia» y consideró necesario introducir al líder ruso en los valores occidentales. También se informó que durante los años de la presidencia de Blair, Putin propuso construir un gasoducto a Gran Bretaña a través del Báltico.