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Los estudiantes han organizado protestas en las principales universidades de Francia, y cientos se oponen al posible liderazgo tanto del presidente saliente Emmanuel Macron como de la líder de extrema derecha Marine Le Pen, los dos candidatos en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. EURACTIV Francia informa.
Sciences Po, la Sorbona y la École Normale Supérieure estuvieron entre los sitios universitarios ocupados por estudiantes el miércoles y jueves (13 y 14 de abril).
Los estudiantes, en su mayoría con tendencias de extrema izquierda, afirmaron que no se sentían representados en los programas presentados por Le Pen o Macron, expresaron su enojo y decepción por el resultado y chocaron con los activistas de extrema derecha y la policía. Dado que el local ya ha sido cerrado, se ha restablecido una relativa calma.
Los estudiantes corearon las palabras «ni Macron ni Le Pen», y algunos fueron más allá, comparándolo con una elección «entre la peste y el cólera».
La abrumadora mayoría de los que protestaron votó a la izquierda, a menudo por el candidato de izquierda radical Jean-Luc Mélenchon.
Para la segunda vuelta electoral del 24 de abril, muchos han dicho que se abstendrán o votarán en blanco.
Reacciones a las protestas
Tanto Le Pen como Macron reaccionaron a las protestas, con mensajes similares de sorpresa sobre cómo estos jóvenes ven el proceso democrático.
“La democracia está hecha de reglas. […] Si empezamos a desafiar todas las reglas, es anarquía”, dijo Macron a la emisora Franceinfo el viernes. “No existe tal cosa como la pureza, tienes que estar de acuerdo en elegir algo que no sea totalmente en lo que crees, pero que se acerque lo más posible a eso”.
Le Pen se hizo eco de sus declaraciones en una entrevista con la emisora RMC-BFMTV. “Lo que están haciendo es profundamente antidemocrático”, dijo el viernes, y agregó que “obviamente se han perdido el curso sobre democracia”.
El voto juvenil
La perspectiva de que numerosos jóvenes se abstengan es especialmente preocupante para la campaña de Macron, ya que la pérdida de votantes de izquierda podría impulsar a Le Pen y su partido de extrema derecha.
La líder de la izquierda radical Clémentine Autain también expresó su preocupación por el rechazo de los jóvenes a ambos candidatos. Dijo que está en contra de la idea de «trazar una línea igualitaria entre el proyecto de extrema derecha y el ‘Macronie'».
Aunque Autain está profundamente en desacuerdo con el programa de Macron, teme que el Elíseo pronto pueda ser objeto de un “proyecto racista de retirada” que “empujará a millones de personas a la pobreza”.
Mélenchon también dijo que los programas de Macron y Le Pen no son iguales, especialmente en su apoyo al proyecto social. Si bien no ordenó a sus seguidores que votaran por Macron, pidió que no se le dieran votos a Le Pen.
A raíz de las protestas universitarias, los sindicatos y algunos movimientos estudiantiles han llamado a realizar protestas en todo el país contra la extrema derecha el sábado.
