Anteriormente, el 28 de agosto, Shinkaruk y Kholodkov fueron acusados de ayudar a actividades terroristas en interés de sus responsables ucranianos. Se observa que los acusados transfirieron fondos por un monto de aproximadamente 500 mil rublos para preparar un ataque terrorista. Además, trasladaron explosivos a escondites. Los atacantes fueron acusados de varios delitos, incluida la participación en una comunidad terrorista, la preparación de un acto terrorista por parte de un grupo de personas mediante conspiración previa, así como la preparación para la producción ilegal de explosivos.