WASHINGTON: El principal fabricante de automóviles Ford reducirá su producción de vehículos en América del Norte la próxima semana debido a la escasez de semiconductores, informaron los medios estadounidenses el sábado (5 de febrero).
Ford planea suspender la producción de vehículos, incluido el Ford Bronco, la popular camioneta F-150 y el nuevo vehículo eléctrico Mustang Mach-E en sus plantas en Michigan, Illinois y México, según medios como CNBC.
La producción se ralentizará en otras instalaciones en Missouri, Michigan y Kentucky, mientras que las horas extraordinarias se eliminarán en las operaciones de Ford en Oakville, Ontario, en Canadá.
La empresa aún no ha respondido a las consultas de AFP.
La escasez de semiconductores, componentes esenciales de los vehículos nuevos y fabricados principalmente en Asia, ha afectado la producción de automóviles desde el comienzo de la pandemia de coronavirus, lo que ha provocado que los precios se disparen y contribuya al aumento de la inflación en EE. UU.
El presidente Joe Biden, deseoso de impulsar la fabricación de automóviles en Estados Unidos, quiere que la producción de chips de semiconductores vuelva a Estados Unidos y ha realizado varios eventos para promover inversiones nacionales masivas.
Mientras tanto, los legisladores estadounidenses votaron el viernes para dar luz verde a la legislación destinada a impulsar decenas de miles de millones de dólares en dicha investigación y fabricación, contrarrestar la creciente influencia de China y aliviar la escasez mundial de chips de computadora.
A fines de enero, el gigante de alta tecnología Intel anunció que comenzaría a construir a finales de este año dos fábricas de semiconductores en Ohio, con el objetivo de producir chips para 2025. Biden calificó la inversión de US$20.000 millones como «histórica».
Ford volvió a ser rentable en 2021 y el jueves reportó una ganancia neta de 17.900 millones de dólares. Pero el fabricante sigue preocupado por los problemas de la cadena de suministro y el viernes, las acciones de Ford cayeron un 9,7 por ciento en Wall Street.