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MADRID: Los pilotos españoles de Easyjet se declararon en huelga el viernes (12 de agosto), pidiendo el restablecimiento de las condiciones que disfrutaban antes de la pandemia de coronavirus, dos semanas después de que una huelga de la tripulación de cabina de la aerolínea de bajo costo resultara en un acuerdo.
Llegando en el punto álgido de la temporada turística de verano, las nuevas paradas de Easyjet se sumarán a los problemas que enfrenta el sector.
La tripulación de cabina del rival económico Ryanair ha estado organizando huelgas de 24 horas desde junio, que probablemente continúen hasta enero de 2023, dijeron los sindicatos.
Los pilotos de Easyjet, por su parte, protagonizan desde este viernes una primera huelga de tres días en los aeropuertos de Barcelona, Málaga y las islas mediterráneas de Palma de Mallorca y Menorca, informó el sindicato SEPLA.
Se planean dos huelgas más de tres días más adelante en agosto.
«Esta es la única alternativa posible para los representantes de los pilotos, luego de más de seis meses de negociaciones, en las que la empresa ha rechazado todas las propuestas presentadas», dijo el sindicato.
La aerolínea canceló ocho vuelos el viernes, la mayoría de ellos desde Barcelona, el segundo aeropuerto más transitado de España.
“Durante los peores meses de la pandemia, acordamos bajar nuestros salarios para garantizar no solo puestos de trabajo, sino la supervivencia de la propia empresa en España”, dijo el sindicato.
Ahora, sin embargo, la empresa “se niega a recuperar las condiciones laborales.
«No estamos pidiendo nada que no tuviéramos hace dos años», dijo un portavoz del sindicato.
A fines de julio, EasyJet dijo que recibió un impacto financiero considerable por las interrupciones en todo el sector, en particular la escasez de personal, pero aún así redujo las pérdidas trimestrales a medida que se recuperó la demanda.
Solo unos días después, las tripulaciones de cabina de EasyJet pusieron fin a su huelga, luego de llegar a un acuerdo con la gerencia para aumentar los salarios en un 22 por ciento durante tres años.
